-¿Por qué estoy aquí?- Taehyung jugaba con los dedos de sus manos mientras miraba suavemente a Jungkook.

Este último respiró profundamente y procedió a explicar la situación.

-Tuvieron que hacerte un lavado gástrico, tomaste alcohol luego de tus pastillas. Eso es una combinación fatal que nunca quieres volver a hacer a menos de que planees suicidarte. Y todo fue mi culpa por haber dejado esa botella de cerveza en la cocina.- Aclaró su garganta y entrelazó sus dedos con los de Tae.

el teñido bajó la mirada e interpretó las palabras que su novio le había dicho.

-¿Pude haber muerto?- Apenas susurró, sintiendo como el aire comenzaba a faltarle.

-Así es osito. Pero ya todo pasó y estás bien.- Apretó ligeramente sus manos. -¿vale?- Buscó con sus ojos la mirada verdosa de Taehyung. -Bebé.- Le llamó en un susurro.

El peli azul levantó la mirada muy lentamente, dejando que varias lágrimas se deslizaran por sus mejillas.

-Si hubiese muerto ellas estarían felices y ya no me molestarían más, koo.-